Un metodo para poner cremalleras (Noche de insomnio 2, primera parte)

Hola a todos, (a  todos los tres que me seguís, je je), y a todos los que por casualidad caigais por aquí. Esta entrada forma parte de la prometida "Noche de Insomnio 2". Os la voy a ir dando por partes, porque, como os dije, fue una noche fructífera, y no quiero que os murais de asco viendo mil fotos en un día. Por otra parte, el proyecto comenzado es largo y todavía está recibiendo los últimos toques. Empiezo por la cremallera porque es algo que mi a mí me acogotó durante mucho tiempo (¿Coser una cremallera? ¡¡Ay, dios mío!! ¿Y no se podría sustituir por un botón sin ojal, una grapa, un clip, una horquilla para el pelo, un moco verde pegajoso?), pero que ahora me resulta útil y no tan dificil. Sólo hay que ponerle un poquito de paciencia. Y es por eso que están todos los pasos fotografiados, uno a uno. Espero que os sean útiles.

Por el revés de la tela pegar una entretela de una cara adhesiva

(Así queda porque para este proyecto me viene bien esta medida, ya que es un bolsillo y así tiene un poco de cuerpo. Si no es así, Basta con que tenga la medida de la cremallera y tres centímetros por todas partes)

Por el derecho dibujar el lugar de la cremallera(¿Habeis visto que tela más guai?)

Y marcar también por el revés

 

Coger un trozo de tela que mida , mínimo, lo que la cremallera, más dos centímetros por todas partes (Lados y anchos)

Centrarla del revés sobre el derecho de la tela

Hilvanarla

Dibujar por el revés el ancho que vais a dejar a la cremallera y pasarle un pespunte.

así queda

Quitar el hilván

Marcar un angulo de 90º que coincida con las esquinas

así queda

Abrir por donde la cremallera DEJANDO EL PICO

Asi queda

Ahora dar la vuelta a la tela que habíamos cosido por el derecho

y hacerla pasar hacia el revés

Y cuando esté, poner alfileres

así se ve por el derecho

Planchar la apertura del derecho

Y del revés

centrar la cremallera y sujetarla con alfileres

Cuidad que esté al gusto, luego chincha descoser.

Hilvanar. En este caso prefiero este tipo de hilván porque, aunque se tarda un poco más, recuperas el tiempo porque cuesta menos de quitar si lo pilla la máquina.

Coser la cremallera  y quitar el hilván

Y eso es todo, amigos. ¡Sin acogotarse ya más en la vida!